Tarde de jueves de enero, lloviendo a mares, sin otra obligación para realizar. Si tengo asuntos pendientes, pero no corren prisa, bien pueden esperar y tampoco me apetece mojarme…vuelvo a mirar ese whassapp que esta mañana me ha mandado Code y que me dice “Quedé con Santi esta tarde para hacer unas ninfas. Te apuntas?”. Dado que ya habíamos intentado otras dos veces quedar pero por be o por befas no pudo ser por parte mía. Esta vez se habían conjurado los astros a mi favor y al mediodía después de comer preparé torno, material para hacer unas ninfas y hasta los magic tool de Petitjean, aún por estrenar por si viraba el viento y nos daba por hacer efémeras.
Las reuniones de montaje rara vez me sirven para llenar cajas, para eso mi mesa de montaje y me pongo a la elaboración en serie de x moscas del mismo tamaño y del mismo tipo, de esas que ya os voy presentando como mis indispensables. Bueno… eso es la teoría fuera de temporada, luego deprisa y corriendo montar media docena de moscas para la jornada de mañana porque no me queda esta o la otra, o porque salían efémeras verdes y las mías eran marrones. Volvamos a hilo conductor; como bien dije estas sesiones no son para llenar cajas, porque o bien preguntamos y vemos alguna técnica, un montaje nuevo, o lo más común nos liamos con algún comentario sobre lo divino o lo humano. También arreglamos la pesca a nuestra manera, mil y una facetas.
Eso sí, Code no permite que en su casa pasemos sed y la cerveza siempre acude rauda a nuestra llamada. Entonces si no había acudido con la idea de llenar las cajas veríamos a ver por donde salía “la soirée”… Llego a casa de Code, y ya tenían él y Santi encima de la mesa los achiperres listos y en mi primera visual noto mucho brillo y color. Santi decía que iba confeccionar alguna ninfa colorista para los tímalos. Code le veo en el torno con unas brassies rojas y verdes muy bien rematadas.
Y aquí entro yo y planto encima de la mesa diecisiete tinseles holográficos comprados en eBay a precio de saldo, creo que en una tienda en Singapur, con nombres tan “sugerentes” como Hot Pink, Crimsom, Dodger Blue y lindezas similares. Ahora había que ver como juntábamos el puzle y empezamos a realizar combinaciones de colores con diferentes bases y recubiertas por los diferentes colores
Me centré en los tonos azules, aprovechando unas cabezas de tungsteno del mismo tono que a saber cuando y donde las había adquirido. Iba sobre un patrón que me sorprendió una tarde de la temporada pasada cuando se erigió en protagonista de la tarde, tinsel azul metálico, bufanda plata y bola azul. Lo primero fue que nos decantamos por un modelo de anzuelo curvo Maruto C46FW con muerte al cual “capamos”, aunque podemos utilizar cualquier anzuelo curvo, pues buscamos patrones no copia exacta de la mosca. Comenzamos con una bola de tungsteno azul de 2,5 mm y seda de montaje naranja el primer color fue tinsel color “Aqua” y bufanda “white” (mosca a la izquierda de la imagen). Como me parecía poco azul las siguientes el cuerpo lo sustituí por color Dodger Blue y el resultado me gustó más, además la bufanda di menos vueltas de blanco haciendo transparentar más el hilo naranja de montaje resultando una bufanda más llamativa (a la derecha de la imagen)
Elaborado un patrón azul probé con un montaje en Maruto D04 BL más tipo “efémera” y queríamos Code y yo probar dos colores, el Yellow y el Purple. Monté bola de tungsteno plata de 2,5 y cercos gris de pluma de hackle, hilo naranja por no cambiar y realice primero cuerpo Purple y bufanda Dodge Blue que había sobrado. Ninfa llamativa sin duda.
A continuación la siguiente mosca el protagonista iba a ser el color Yellow, que me dio esta mosca que veis a la derecha, que a primera vista sí parece más normal, teóricamente más “natural” y por ende con mayores posibilidades de ser atada al terminal. La bufanda son unas vueltas del Purple que estábamos usando
Ahora queda lo más complicado. Su bautismo en agua. Para ello debo de olvidarme de mi clásico aparejo de ninfas e ir probando estos modelos para ver si capturan truchas. Alguno sí se incorporará a mi caja de moscas. Los demás, quizás la mayoría, aguardarán pacientes esa oportunidad de capturar unas truchas despistadas en un día sin mucha actividad para que vuelva a creer en ellas, para investirlas de eso tan importante para un pescador, la confianza en el señuelo, quien sabe si para crear un nuevo patrón y tal vez pasar a la categoría de indispensables, como en su momento me ocurrió con mi ninfa negra ya expuesta.
Luego tomando una cerveza con el hermano de Code, este apostilló y de manera cierta y con sarcasmo “con todo ese colorido, cómo voy a coger yo truchas pescando con algo normal”. Razón no le falta; . Pero el abanico de colores con el que vamos a adornar nuestras cajas y la buena tarde que pasamos no nos lo quita nadie.
Los anzuelos eran Maruto C46FW.
ResponderEliminarYo sigo probando combinaciones. Algunos montajes parecen los maniquís de las tiendas de ropa, miras para ellos pero nunca ten pondrás esa ropa.
Gracias por la referencia Code, ya actualice la entrada con ese dato. Efectivamente, no las vamos a poner aunque podíamos organizar un dia lo que te comenté lo de la mosca cojonera, ponernos a pescar una tarde y gana el que saque una trucha con la ninfa más estrafalaria
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